Hay polémicas novedades sobre el accidente de Indianápolis, además de lo que os contamos el otro día. Parece ser que el 'tour manager' se resistió a retrasar el concierto y que la gravedad del tiempo que se aproximaba no fue comunicada a Jennifer Nettles.
Ella dice que en ningún momento se le pidió retrasar el espectáculo y que no se hubiera resistido aunque digan que ella ya había calentado o porque la banda tuviera un largo viaje después para ir a otro concierto a Iowa. Tampoco que ella era consciente de la gravedad de la situación meteorológica.
El testimonio completo de Nettles y de Kristian Bush aún no han sido hecho públicos. Sin embargo un abogado de algunas de las víctimas habló en contra de lo que dijo la cantante: "Parece que su testimonio desafía la realidad y es incompatible con la versión de los hechos que tenemos de otros testigos y el hecho de que no se les pague si hubieran tenido que suspenderlo".
Lo que no queda claro es de quién era la responsabilidad de retrasar el concierto, pero Nettles dijo que no cree que fuera de ella: "Yo no siento que sea mi responsabilidad o responsabilidad de mi gestión de evacuar al público en caso de peligro. ¿Me preocupa su seguridad? Por supuesto".
Lo que queda claro es que ellos no eran los responsables de la logística y de la seguridad del concierto. Aunque habrá que esperar para saber los hechos defnitivos, porque el juicio no se hará hasta el año que viene o el 2014. Cualquier novedad que surja sobre este hecho os la contaremos.
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