(28/10/2015)
Hoy traemos hasta nuestra web a Paul Bogart, un cantante que nos trae canciones frescas de corte clásico. Él mismo es un alma vieja con una habilidad especial para captar las tradiciones consagradas por el tiempo y reflejando esos sentimientos clásicos.
"Toda mi música simplemente encaja bajo un sombrero vaquero", dice Paul, explicando su sonido. "Quiero que la gente se vea directamente en mí, que sean reales y eso es lo que mi música es; canciones sinceras y honestas con la que la gente pueda identificarse".
Y además de cantante, compone con una ética de trabajo que se mezcla entre pasión e integridad.
"Desde que era niño, mi padre me enseñó que si eres bueno, nunca hay necesidad de alardear", cuenta Bogart. Una actitud que impregna lo que el artista hace día a día, tanto si se trata de recorrer las carreteras de los EE.UU. tocando en más de 90 conciertos al año o componiendo con algunos de los grandes nombres de Nashville de la música country. Un cantante que tiene corazón de vaquero y espíritu de caballero.
Le encanta el rodeo. Comenzó a compertir en la Asociación American Quarter Horse a los 12 años, y no ha parado. Algo que le ha ayudado además a conseguir becas para la universidad. Así consiguió varios títulos mundiales en su haber.
La actitud de "poder hacer" y su disposición natural le han servido en todos los ámbitos de la vida, pero su historia en la industria de la música comienza como un cuento de hadas.
Nacido y criado en Oologah (Oklahoma), Bogart había tocado en espectáculos en todas partes alrededor de la universidad. Y a él le hacía ilusión tocar en su ciudad natal, por lo que durante su primer año en la Universidad Estatal de Rogers, se puso en contacto con una escuela local para saber si necesitaban a alguien para recaudar fondos. La persona que planificaba los eventos aceptó, y pronto, folletos caseros improvisados fueron publicados por todas partes alrededor de la ciudad anunciado el evento.Unos días más tarde, Bogart recibió una llamada de teléfono que no se esperaba en la casa de su padre.
"Cogí el teléfono y el chico en el otro extremo me dice: 'Hola, mi nombre es Floyd y trabajo para Garth Brooks. Garth vio tus carteles y quiere conocerte'. Bueno, pensé que era una broma, así que me inventé una excusa en la que le dije que tenía que revisar mi agenda!", relata Bogart con incredulidad. "Una semana después, el chico volvió a llamar y me preguntó de nuevo si tenía tiempo para reunirme con Garth, y esta vez le pregunté: ¿Hablas en serio? Verificó todo, y por supuesto, Garth había conseguido de alguna manera un ejemplar de mi disco de demostración de la universidad y quería hablar de música".
Ese encuentro se convirtió en una gran fuente de estímulo para Bogart, con Brooks animando a Paul a mudarse a Nashville para ver si era un buen paso.
"Recuerdo a Garth diciéndome, 'eres un cantante exitoso porque estás en Oklahoma; si quieres ser un músico de éxito, tienes que moverte a Nashville'. Y así lo hizo tras su graduación en la universidad. Y con determinación e integridad, optó por trabajar duro y empezar de cero. Poco a poco se fue metiendo en la composición y colaborar con todo el mundo que pudo. Pronto se encontró componiendo con nombres como Billy Montana ("Bring on the Rain", Jo Dee Messina), Tom Douglas (Lady Antebellum, "Run to You"), y Jamie O'Hara (The Judds, "Grand Pa (Tell Me 'Bout the Good Ol' Time')"). Al respecto Bogart dice: "Sólo agradezco la oportunidad de estar simplemente en la misma habitación con estos escritores, tocando y aprendiendo de ellos".
Y justo cuando Bogart estaba asentando su vida en Nashville, su mundo se puso al revés. En la inundación de Nashville en 2010, toda la casa de Paul fue casi arrasada. "Mi esposa y yo salimos de la casa con la ropa a nuestra espalda, todo lo demás en nuestro pequeño mundo estaba en ruinas".
Sin seguro y con el pago de la hipoteca, el artista tenía dos opciones o aprender a poner paneles de yeso o hacer lo que mejor sabía, hacer música.
"Empecé a llamar a todo el mundo donde jamás había tocado, con el sombrero en la mano, y les dije: 'No sé si su evento necesita algún artista, pero estoy seguro de que podría hacer ese trabajo'". Y a partir de ahí consiguió toda una gira.
"De repente yo estaba haciendo rodar las ruedas de mi camión y tocando en 90 conciertos en un año", dice con una sonrisa enorme."No fue nada menos que un milagro".
Así, Bogart decidió que era hora de grabar un álbum de larga duración, con la ayuda de algunas de las personalidades más exitosas de Nashville. Un repertorio de 10 canciones compuestas y coproducidas por él y Jim Beavers (Luke Bryan, Tim McGraw). Un trabajo que lleva por título 'Oklahoma Wind'.
Y en este álbum nos encontramos canciones como su último single "Cowboy Ride", un tributo a esos hombres y mujeres que inspiraron a generaciones de cantantes. Así suena este tema en el vídeo que lo acompaña:
0 comentarios:
Publicar un comentario